Rio Yarra de Melbourne

El río Yarra es la principal arteria de la ciudad, que a lo largo de los años ha crecido a lo largo y ancho de sus márgenes, como un hilo conductor hacia la bahía de Port Philip. El río tiene una longitud de 240 kilómetros desde su nacimiento en Baw Baw National Park hasta su desembocadura en la bahía Port Phillip.

En plena fiebre del oro, el río Yarra también cobró protagonismo en el estado de Victoria, ya que sus bancos de arena fueron una fuente de oro durante los años dorados del siglo XIX. Las constantes acciones sobre el río en busca del preciado metal llegaron incluso a provocar el cambio del curso del río en varios tramos.

El río Yarra marca la línea divisoria natural entre el norte y el sur de la ciudad. La orilla norte bordea el núcleo urbano de la ciudad, y sus aguas tranquilas bajan paralelas a los grandes edificios y rascacielos situados en el centro. La orilla sur, en cambio, discurre paralela a los parques y jardines, por lo que el río es utilizado para disfrutar de múltiples deportes.

En los años ochenta se rejuveneció la sección central del río, creando múltiples accesos desde la orilla sur para practicar deportes como el piragüismo, la vela, etc, por lo que es una imagen muy habitual ver a cientos de remeros, tanto profesionales como aficionados, entrenándose en el río.

Paralelo al río Yarra está situado el Melbourne Exhibition Centre, donde se celebran ferias de muestras anuales de todo tipo, desde ferias de automoción, al bricolage o la medicina alternativa. El Melbourne Exhibition Centre cuenta también con un muelle en el que se encuentra atracado el Polly Woodside, un barco original de 1885 restaurado, cuyo casco alberga el museo marítimo.